CLINT EASTWOOD VI / LOS ÚLTIMOS AÑOS: NO HAY QUIEN PUEDA CON ÉL




Eastwood y Damon se volverían a juntar para el rodaje de una de las pelis más infravaloradas y sobre la que más de puntillas se ha pasado de la carrera del primero (esto, como siempre, es una opinión personal), la muy interesante HEREAFTER (MÁS ALLÁ DE LA VIDA), estrenada a finales de 2010. Clint vuelve a recurrir a lo sobrenatural y la cinta se centra en tres historias paralelas sobre personas afectadas de alguna manera por la muerte, y sobre sus propias comunicaciones con personas muertas. Matt Damon interpreta a GEORGE LONEGAN, un vidente que deja de tener interés por su don, y lo acompaña la guapa actriz belga CÉCILE DE FRANCE, dando vida a MARIE LELAY, una periodista francesa que, estando asignada en la India, sobrevive al brutal tsunami acontecido en el Océano Índico en Diciembre de 2004. Otros actores que aparecen son BRYCE DALLAS HOWARD, la bastante conocida hija del ya nombrado Ron Howard, y JAY MOHR.

La película parte de un guion espontáneo del muy reputado guionista y dramaturgo londinense PETER MORGAN, quien lo escribió sin tener que hacer frente a ningún encargo. Este guion terminó llegando a un Clint Eastwood atraído por el hecho de rodar una peli de tintes supernaturales y por cómo Morgan había incluido sucesos reales en la ficción



Cartel del film que muestra una fecha
de estreno ya en 2011, como fue
el caso de España




Más o menos como pasó con Invictus, Más Allá De La Vida no tuvo problemas para recaudar de forma holgada algo más del doble de su presupuesto, pero justo al contrario que con aquella, las críticas fueron mixtas pero a mí me gustó mucho. Me llamaron la atención las escenas rodadas en Londres, y es que creo que este film es, junto con Million Dollar Baby, el único en la filmografía de Clint en la que aparece dicha ciudad (Maggie y Frankie viajan a Europa para que ella pelee y creo que hay algún combate en Inglaterra, ya que me parece recordar haber visto por ahí la bandera del Reino Unido). Sea como fuere, me gustan los dos papeles principales y el trabajo de Damon y De France. Y al igual que una película como THE IMPOSSIBLE (LO IMPOSIBLE, de J.A. BAYONA, 2012) pondría de manifiesto muy poco después, las escenas relativas al tsunami antes mencionado son bastante impactantes. Pero sobre todo me atrae, sin que sirva de precedente, la relación de la película con lo sobrenatural y el tema del más allá, y el uso poco escrupuloso que hacen ciertas personas de él para así explotar la impotencia, la buena fe y el desconocimiento de otras.

Los críticos no están conmigo, aunque el habitual Roger Ebert se mostraba sorprendido para bien, debido al trato amable que según él la cinta da al tema de la hipotética vida después de la muerte. En general, opiniones del estilo fueron la excepción (las webs habituales tampoco indican mucho entusiasmo por parte del público), haciendo notar la crítica que la premisa da que pensar, pero la trama no está a la altura. Algún crítico comenta que el film incluso cruza a veces la línea del ridículo (no recuerdo nada así, la verdad, aunque han pasado unos cuantos años y no he vuelto a ver la película), aunque esto se equilibra con cierta emoción, un peculiar sentido del humor y un enfoque realista de lo fantástico, si es que algo así tiene sentido. También es cierto que recuerdo haber visto alguna vez por ahí como a esta película se la mete en el mismo cajón de cintas como EL SEXTO SENTIDO (M. NIGHT SHYAMALAN, 1999), etc, y no creo que eso sea correcto.



De France y Damon en una escena de la película




Más Allá De La Vida tuvo una nominación a los Óscar, en la categoría de Mejores Efectos Visuales, pero de nuevo la cinta se fue de vacío.

Clint Eastwood compuso la banda sonora, una vez más.


En cuanto a las curiosidades, hay que comentar que Clint Eastwood había quedado muy favorablemente sorprendido con el trabajo de Matt Damon en Invictus, por lo que llegó incluso a cambiar su agenda para que un muy ocupado Damon (inmerso en el rodaje de THE ADJUSTMENT BUREAU, conocida en España como DESTINO OCULTO, de GEORGE NOLFI, 2011) pudiese cumplir sus otras obligaciones y estar también en esta película. Antes de eso, y debido a su apretada agenda, el propio Damon recomendó que su papel pasase a otros actores, entre los que estaba uno de mis preferidos, CHRISTIAN BALE. Eastwood no quiso, por lo que se llegó a la solución anterior, lo que supuso parar el rodaje unos dos meses hasta que Damon volvió a estar disponible.



Eastwood instruye a una atenta Cécile De France




Para interpretar a la pareja de gemelos ingleses, JASON MARCUS, Eastwood prefirió niños sin ninguna experiencia en actuación antes que chavales con ella. Estos niños, los hermanos FRANKIE y GEORGE MCLAREN, interpretaron cada uno a un gemelo, aunque luego terminaron interpretando ambos al mismo.

El rodaje tuvo lugar en varios países (Francia, Inglaterra y Estados Unidos), pero todo se basó en el Reino Unido, por las ventajas fiscales y por la financiación británica.

Y como coincidencia dramática y desafortunada, decir que esta peli se estrenó en Japón a finales de Febrero de 2011, pero el once de Marzo siguiente aconteció en la región japonesa de Tõhoku el terremoto (junto a un tsunami) registrado más potente de la historia de ese país (y cuarto del mundo) desde que la sismografía moderna comenzó a principios del siglo XX. Cerca de veinte mil personas perdieron la vida, sin contar heridos y desaparecidos, además de los enormes daños materiales, por lo que Más Allá De La Vida fue retirada de la cartelera japonesa antes de tiempo, debido a que sus terribles escenas relativas al tsunami de 2004 no eran las más apropiadas para presenciar en ese momento.



Lonegan intenta pasar página junto a Melanie (Howard)




En una carrera como la suya es más que lógico que Clint Eastwood se haya codeado con algunos de los nombres de más prestigio de la historia del cine, ya sean directores o actores, y su siguiente película, el biopic J. EDGAR (2011), añadiría otro de un calibre gigantesco a la lista: nada menos que el inigualable LEONARDO DICAPRIO, con toda seguridad uno de los cinco actores americanos más importantes de los últimos treinta años. En esta película DiCaprio dio vida al polémico J. Edgar Hoover, afamado primer director del FBI, y en ella también participaron el ahora caído en desgracia ARMIE HAMMER, la siempre genial NAOMI WATTS, el a día de hoy ubicuo ADAM DRIVER, quien debutó en esta cinta con un pequeño papel, y la más que prestigiosa actriz inglesa JUDI DENCH. Un reparto de muchos quilates que además contó con la muy conocida LEA THOMPSON (LORRAINE en la saga BACK TO THE FUTURE, o REGRESO AL FUTURO, de ROBERT ZEMECKIS), una nueva aportación de Jeffrey Donovan, JOSH LUCAS DERMOT MULRONEY.

En J. Edgar se usa una narración no lineal, y la película alterna entre los años de trabajo de Hoover a la hora de instituir el FBI, su posterior intento de salvaguardar esta oficina frente a lo que él percibía como amenazas, y las narraciones sobre lo acontecido en los primeros años de la misma que él mismo hace, ya de anciano (Hoover falleció en 1972), a una serie de escritores fantasma.



Di Caprio junto a Clint en el rodaje




A pesar de que no fue prevista, la colaboración entre Eastwood y el guionista DUSTIN LANCE BLACK, activista por los derechos LGTB, fue percibida por la crítica como sorprendente. Black había escrito el guion para MILK (2008), la triunfante película de GUS VAN SANT sobre el político y activista gay HARVEY MILK, primera persona abiertamente homosexual en ser elegida para un cargo público en California. Esta cinta obtuvo un buen chorro de nominaciones para los Óscar, suponiendo el segundo de su carrera para Sean Penn y además otro para Black como guionista, a quien después se le encargó un guion para una película sobre Hoover, que acabaría llegando a Eastwood algún año después. Quizás por este motivo, la película entra en el tema de la supuesta homosexualidad de Hoover (sobre la cual hay discordia, aunque se trató de una persona acerca de quien se rumoreaba que, entre otras cosas, aún vivía con su madre pasados los cuarenta años, y que solía amenazar a todo aquel que hiciese insinuaciones sobre su sexualidad), centrada en su relación con su ayudante y posterior heredero CLYDE TOLSON, interpretado por Hammer.

Como venía siendo tendencia en las películas recientes de Clint, la película volvió a hacerlo bien en taquilla. Una de las razones por las que fue contactado fue su famosa eficiencia en cuanto a tiempo y dinero a la hora de rodar, y nuevamente estuvo a la altura de dicha fama terminando la película por debajo del presupuesto previsto, para acabar recaudando, una vez más, más del doble del mismo.

Los críticos fueron, como era de esperar, muy entusiastas con la interpretación de DiCaprio, de quien se dijo que insinuaba aspectos poco conocidos sobre Hoover, incluso quizás para él mismo. Pero el resultado total no fue recibido con tantos elogios. Se destacó la descripción de los aspectos más controvertidos, públicos y privados, del personaje, e incluso lo patético de algunos de ellos, siempre de forma medida y sin que la cinta se recrease más de la cuenta en ciertas cosas. Pero también se habló de un producto pomposo, con problemas narrativos y algunos más en asuntos como la iluminación o el maquillaje.



Un muy airado J. Edgar Hoover




He hecho la cuenta y creo que, de las dieciocho películas que Eastwood ha dirigido en este siglo, he ido al cine a ver once de ellas, pero esto no pasó con J. Edgar. Es más, no tengo ningún recuerdo de esta película estando en cartelera o de mí pensando si ir a verla o no, algo que es raro porque si se trata de una película de Clint difícilmente me lo voy a pensar. Me pasó totalmente desapercibida y la vi tiempo después, con cierta precaución y mucha pereza, al tratarse de la biografía de alguien sobre quien, por muy famoso que fuese, no sabía apenas nada, y que encima se dedicaba a la política y la burocracia. Pero se trata de Eastwood y DiCaprio, y el resultado fue mucho mejor del esperado, la verdad. Como decía una crítica, una película sobre una persona con tanto poder como esa, tenía que ofrecer algo que mostrase las motivaciones de la misma, o resignarse a que el público viese que los tejemanejes de su trabajo resultaban mucho más atractivos que los suyos propios, y la película no conseguía estar por encima de este dilema. Yo no llego a tanto, es un análisis que me queda grande pero desde luego Eastwood muestra a un Hoover muchas veces sobrepasado, gracias a un impecable DiCaprio, y no sé si los asuntos relativos al FBI de la época eran más interesantes que los de Hoover, pero la peli desde luego lo es. Y luego está lo de la vida sexual del tipo, de quien también se decía que era completamente ajeno a algo así. Tenía que ser difícil contar con ciertas inclinaciones, y lidiar con ellas, siendo quien era esta persona en los Estados Unidos de mitad del siglo pasado.



Di Caprio junto a Hammer y Judi Dench, su
madre en la ficción




Se rumoreó que DiCaprio, para entonces una estrella más que consolidada, bajó su caché de los usuales veinte millones de dólares a sólo dos, para así poder participar en la película. No sé los motivos, ni tampoco la veracidad de este dato, pero de ser cierto, el detalle sería bastante llamativo, aunque no creo que tuviese nada que ver con Eastwood, ya que, por muy atractivo que pueda ser trabajar con él, he leído que lo de dicha bajada de caché, de haber ocurrido, pasó antes de que Clint se hiciese cargo del proyecto. En cualquier caso, es probable que el bueno de Leonardo se terminase arrepintiendo de haber trabajado con Eastwood, y no precisamente por las insoportables sesiones de maquillaje necesarias para interpretar a un envejecido Hoover. Ya se ha comentado la austeridad de Clint al rodar, y su poca afición por repetir tomas, algo que en un momento dado debió chocar con la intensidad y el perfeccionismo de un Leonardo acostumbrado a otras cosas. No hubo comentarios al respecto, pero parece que la relación se enfrió por ese motivo, lo que unido a las no muy entusiastas críticas recibidas por la película (dejando de lado el trabajo de DiCaprio), hacen que esta colaboración entre las dos estrellas vaya, con toda seguridad, a ser la única.



Haré tantas tomas como quiera, Clint.
Espera sentado, chavalote.




HELEN GANDY, la (según el propio Hoover) indispensable y duradera secretaria del personaje, fue interpretada por Naomi Watts, pero no antes de que otra estrella, CHARLIZE THERON, se bajase de la producción. Antes que a Watts, Eastwood consideró a la también genial AMY ADAMS, con quien se juntaría en muy poco tiempo.

Clint volvió a componer la partitura y su hijo Kyle también participó, apareciendo además en escena como miembro de una banda musical, y en cuanto a los premios, DiCaprio consiguió una nominación no concretada como mejor actor en los Globos De Oro.

En lo concerniente a la precisión histórica de lo que se narra en la película, ésta acierta al presentar a Hoover como un reformista que buscó modernizar y profesionalizar su departamento, introduciendo en él métodos científicos, pero la treta narrativa que muestra a Hoover dictando sus memorias es ficticia. Como también parece serlo el hecho, narrado en la trama, sobre Hoover y una carta dirigida en 1964 a MARTIN LUTHER KING, con la intención de chantajearlo usando ciertas indiscreciones sexuales del político. King entendió que lo que se pretendía era que se suicidase, aunque hay quien vio aquí un intento de que declinase el Premio Nobel De La Paz, que ganó ese mismo año. Sea como fuere, dicha carta existió, pero parece poco probable que fuese escrita por Hoover, como dice la cinta. Aunque sí parece posible que delegara esta tarea en otras personas del FBI, lo que viene a ser casi lo mismo, no?



Cartel de la película




Eastwood volvió a actuar en la película sobre beisbol TROUBLE WITH THE CURVE (GOLPE DE EFECTO), estrenada en 2012, y por primera vez desde En La Línea De Fuego (sin contar su cameo en Casper), no se dirigió a sí mismo. De hecho me parece recordar haber leído que, a estas alturas, Clint no sólo se planteaba no trabajar más como actor para otros directores, si no que tras Gran Torino se planteaba no volver a actuar más en absoluto. Por eso, creo que esta película no iba a contar con él pero aceptó trabajar en ella como favor personal al director, ya que el proyecto acabó en manos de su colaborador habitual ROBERT LORENZ.

Eastwood hace de GUS LOBEL, un muy veterano ojeador para los ATLANTA BRAVES, que intuye que su puesto corre peligro por ser considerado un dinosaurio incapaz de adaptarse a nuevos métodos. Lobel se verá inmerso en la que podría ser su última tarea como scout, para la que contará con su hija MICKEY, una abogada con la que tiene una relación tirante. Mickey (interpretada por Amy Adams) se apunta debido a que Pete (JOHN GOODMAN), buen amigo de Gus, se lo pide porque sospecha que Gus puede tener algún problema de salud.



Goodman, Adams y un señor que no me suena




Scott Eastwood tiene también un papel (el jugador BILLY CLARK, probablemente en homenaje a un antiguo jugador de los Braves), y puedo pasar sin la presencia de un tipo como JUSTIN TIMBERLAKE, que interpreta a JOHNNY FLANAGAN. Y es que los cantantes petardos metidos a actores, o viceversa, me generan cierta desconfianza. Pero tengo que ser justo, he visto otras pelis en las que aparece él y en ninguna he pensado que me molestase su presencia, la verdad. Golpe De Efecto no es una excepción y la película, siendo como es una cinta predecible y poco ambiciosa sobre deportes, me encantó. Me pareció más que entretenida, a pesar de que todos sabemos lo que de una u otra forma va a pasar, y el papel de Lobel le viene perfecto a Eastwood, siendo (esto es una ocurrencia mía) una réplica no violenta de Walt Kowalski en Gran Torino, salvando las debidas distancias, claro está. El mundo que Kowalski ya no conoce es aquí el deporte con el que Lobel ha convivido toda la vida, y el propio Lobel, desconfiado y reacio a ciertas cosas tendrá que aprender a lidiar con ellas.

Y no lo puedo evitar, soy muy fan de Amy Adams y tengo que reconocer que me encanta verla junto a Eastwood. Al igual que me pasa con Hilary Swank y su papel en Million Dollar Baby, me da igual lo que Adams haga, ya que siempre será la protagonista de ARRIVAL (LA LLEGADA, dirigida por el genial DENIS VILLENEUVE, 2016). Tiene muchos otros trabajos dignos de mención, también en la televisión, pero en lo que a mí respecta, La Llegada es suficiente.



Clint Eastwood rejuveneciendo por momentos junto a Amy Adams




De una película así no se podían esperar grandes titulares ni críticas entusiasmadas por el valor artístico de la misma, pero a la gente en general le gustó (un respetable 6,8 en IMDB) y además, a quién le importa eso a estas alturas? La crítica habló de una película predecible y poco impresionante a efectos dramáticos, pero elevada por el carisma de Eastwood y su química con una encantadora Amy Adams. Para qué quieres más?

La cinta empezó bien en taquilla pero fue perdiendo fuelle, y con sus cerca de cincuenta millones de dólares recaudados en todo el mundo creo que ni siquiera llegó a recuperar su presupuesto, siendo la segunda recaudación más baja de una peli con Eastwood de actor, sólo superada (y con creces) por Deuda De Sangre.

El título original viene, si recuerdo bien, de los problemas que tiene el bateador al que Gus y Mickey tienen que echar el ojo, para golpear una bola con curva.



Lobel con su hija y Flanagan, interpretado por Timberlake




La nota negativa de la producción la puso el multitudinario pleito que, un año después de su estreno, interpuso un tal RYAN BROOKS contra básicamente la humanidad entera. Esta persona alegaba que el guion de RANDY BROWN (en el que se basaba la película) era demasiado parecido a uno suyo llamado OMAHA, que DON HANDFIELD, un antiguo colega suyo, le había encargado para luego llevárselo con él, aún inacabado, tras un desencuentro entre ambos, manipularlo y utilizarlo para su beneficio, etc. Por lo visto, y con ánimo de resumir el resto de la historia, el tiempo y el trabajo de los abogados de la defensa fueron poniendo a Brooks en su sitio, arrinconándolo y haciendo que rebajara sus pretensiones hasta que él mismo desestimó el asunto en 2016. No estoy diciendo que quizás no tuviese algo de razón, ya que no lo sé, si no sólo lo que acabó pasando.


Y como último apunte, más que negativo, triste, destacar que ésta fue la última película en la que Constantino Romero prestaría su voz a Eastwood. Como ya se comentó, el afamado y polifacético Constantino fallecería de manera temprana en Mayo de 2013, y sólo entonces se supo que el motivo de su pronta jubilación (el Diciembre anterior), y causa de su temprana muerte, fue la Esclerosis Lateral Amiotrófica que padecía desde pocos meses antes. Comentar que, si bien Clint Eastwood fue el actor al que más veces dobló, su filmografía como actor de doblaje incluye títulos míticos en los que puso voz en español a las interpretaciones de ROGER MOORE, Sean Connery, ARNOLD SCHWARZENEGGER, CARL WEATHERS, MR. T DONALD SUTHERLAND, JAMES EARL JONES, JAMES COBURN, DAN AYKROYD o RUTGER HAUER, entre otros. Joder, si hasta dobló al mismísimo PELÉ en ESCAPE TO VICTORY (EVASIÓN O VICTORIA, dirigida por JOHN HUSTON y estrenada en 1981) y participó en la famosa serie de dibujos MAZINGER Z!

Un grande. Descanse en paz.




Uno de los carteles de la película,
concentrado sólo en Eastwood, en vez
del habitual con los tres protagonistas





Lo siguiente fue el estreno como director de JERSEY BOYS en 2014, una cinta sobre de THE FOUR SEASONS, un cuarteto vocal de Nueva Jersey. Veo que en ciertos sitios la película se vende como un musical y no creo que eso sea correcto. Tiene que ver con la música, obviamente, y hay canciones, pero estas no son parte de la narración ni los protagonistas cantan o bailan (en vez de hablar) para llevar a cabo sus interpretaciones, como es costumbre en las películas de ese género. O eso, al menos, es lo que yo recuerdo. De hecho, este film se basó en el musical del mismo nombre, estrenado en 2004 y presentado en Broadway hasta 2017 (con algunas giras fuera de Estados Unidos), cuyos autores también escribieron el guion de la peli.

Los tres años que pasaron desde que se estrenó J. Edgar (2011) hasta esta película, suponen el lapso de tiempo más largo sin que Eastwood dirigiese ningún proyecto desde los tres que a su vez transcurrieron entre Ruta Suicida y Bronco Billy, a finales de los setenta. Y esa fue la única otra ocasión en la que Eastwood dejó pasar tanto tiempo sin ponerse a dirigir desde que se puso tras la cámara en 1971, con Escalofrío En La Noche. Como en otras ocasiones, él no era quien iba a dirigir la película en primer lugar y, una vez que el asunto acabó en sus manos, excepcionalmente pidió que se reescribiese el guion (en vez de usar el primer borrador) ya que, según él, faltaban muchas cosas.

Sin contar al muy famoso CHRISTOPHER WALKEN (quien interpretar al mafioso GYP DE CARLO), el resto del reparto me es totalmente desconocido. Es más, buena parte del reparto principal está compuesta por los actores que tomaron parte en las distintas representaciones del propio musical. Clint dijo que había sido presionado para que los protagonistas fuesen actores más famosos y con más tirón, pero que se había negado porque era imposible que otros actores pudiesen hacer mejor el papel que alguien que ya lo ha interpretado cientos de veces sobre las tablas.  También hay un pequeño papel para dos de las hijas de Eastwood: Francesca, de quien ya se habló, y Kathryn, otra miembro del numeroso clan.



The Four Seasons: Valli, Gaudio, Massi y De Vito, sin
orden aparente, ya que no recuerdo quién es quien



La historia abarca desde principios de los años cincuenta, cuando los cuatro chavales se conocen y empiezan con el grupo, hasta el ingreso de The Four Seasons en el Rock & Roll Hall Of Fame, en 1990, y la trama incluye algo relativo al actor JOE PESCI, aunque he de reconocer que lo estoy leyendo ya que no me acuerdo mucho de la película, y eso que la vi hace relativamente poco. Y es que si J. Edgar me pasó desapercibida en su día, ésta mucho más, y cuando me decidí a verla fue sólo por el afán de completar la filmografía de Eastwood. La pereza era infinita porque, seamos serios, la historia llena de canciones de un grupo vocal repipi de hace décadas es de lo último que me apetece ver. Y sin embargo, sin ser una peli que me impresionase, me entretuvo bastante más de lo esperado, ya que no esperaba ninguna conexión con el mundo del hampa y todo eso. No es precisamente GOODFELLAS (UNO DE LOS NUESTROS, la muy conocida e icónica cinta de MARTIN SCORSESE estrenada en 1990), no nos vayamos a engañar, pero la trama se mueve en esos ambientes y lo que yo pensaba que era el ascenso a la fama de un grupo coñazo y poco más, es una historia mucho más dramática y con más impacto. Hay, por lo visto, inexactitudes entre ciertos asuntos de la trama y la vida real de los personajes que, por lo que leo, creo que son deliberadas y provienen ya del libreto de la propia obra musical.


Alerta spoiler.

No creo que esto pueda definirse exactamente como un spoiler, ya que no cuenta nada de la trama, pero pongo el aviso por si alguien quiere ver la película, ya que así no le estropeo la pequeña sorpresa del final. Y es que, si bien ya he dicho que ésta no es una cinta musical propiamente dicha, al final del todo sí que hay un número musical con todas las letras, en plan divertido y que, si recuerdo bien, es más una cosa del reparto que de los propios personajes. Es como poco curioso ver a un Christopher Walken, quien ya andaba por los setenta años en el momento del rodaje, bailando.



Eastwood con dos de los actores



Jersey Boys superó su presupuesto con la recaudación total, aunque no por demasiado, y las críticas no fueron entusiastas, desde luego. A la par que se elogiaba la música, se criticaba que por cada momento brillante de la película tocase ver minutos de peleas y discusiones. Algunos de los mejores comentarios se los llevó Walken, a la vez que se dejaba caer que un hipotético papel más importante de éste en la trama hubiese beneficiado a la cinta.

El propio FRANCIS VALLI, uno de los miembros reales de aquel grupo, criticó la película diciendo que no se había hecho bien y que quizás Eastwood no fuese la persona correcta para dirigirla. Dijo que no era una mala película pero que podía haber sido mucho mejor y, dado que se trataba de una peli sobre gente real y que dicha gente estaba disponible, se le podía haber consultado para que todo saliese mejor.

Un paso raro en la carrera de Clint, pero en lo que a mí respecta, bastante mejor de lo esperado.



Jersey Boys, una rareza en la
filmografía de Eastwood




También en 2014 se estrenó la polémica y muy exitosa AMERICAN SNIPER (EL FRANCOTIRADOR), que contaba la historia de CHRIS KYLE, el muy condecorado y más letal tirador del ejército americano tras cuatro servicios en la guerra de Irak (2003-2011), y cómo su éxito militar pasó factura a su vida personal (fue dado de baja con honores en 2009) . Esta película se basó libremente en el libro que el propio Kyle escribió (junto con Scott McEwen y Jim DeFelice) en 2012, llamado AMERICAN SNIPER: THE AUTOBIOGRAPHY OF THE MOST LETHAL SNIPER IN U.S. MILITARY HISTORY.

Kyle, quien falleció en 2013 a los treinta y ocho años, fue interpretado por el muy famoso BRADLEY COOPER, en su primera colaboración con Eastwood, mientras que la espectacular SIENNA MILLER dio vida a TAYA STUDEBAKER, la mujer de Kyle.



Bradley Cooper, a la izquierda, caracterizado como Chris Kyle, quien
aparece a la derecha con el libro en el que se basa la película




Hubo cierto baile de nombres una vez que Warner se hizo con los derechos del libro en 2012, ya que Cooper (uno de los productores) quería que CHRIS PRATT interpretase a Kyle (hay también cierto parecido físico entre ambos), pero Warner dijo que sólo estaría en el proyecto si era Cooper el protagonista. En un principio, el director DAVID O. RUSSELL, quien venía de encadenar una serie de éxitos importantes, iba a ponerse tras las cámaras, pero no sé si la repentina muerte de Kyle trajo cierto oportunismo (además del inevitable aumento de interés en la historia), ya que lo siguiente que se supo es que un director de más perfil, nada menos que Spielberg, iba a ser el encargado de la dirección. Spielberg buscaba un enfoque más psicológico y sus ideas llevaron a que su visión del asunto no entrase dentro del presupuesto que manejaba Warner, por lo que se bajó de un proyecto al que se subiría Eastwood en el verano de 2013.

El presupuesto de menos de sesenta millones de dólares fue ampliamente superado por los cerca de quinientos cincuenta que la película recaudó en todo el mundo, lo que supuso que no sólo se convirtiese en la película más exitosa comercialmente de la carrera de Clint Eastwood (además de la más exitosa suya en cada país en la que fue estrenada), si no también en el film bélico más exitoso de todos los tiempos en lo que a la cartelera mundial se refiere, batiendo el récord que el propio Spielberg tenía desde 1998 con SAVING PRIVATE RYAN (SALVAR AL SOLDADO RYAN). Entre otros récords, ya que por ejemplo, siendo candidata a la mejor película en los Óscar de 2015, recaudó tanto como todas las demás nominadas juntas.



El francotirador apuntando directamente a la taquilla




Las puntuaciones de las principales páginas de referencia indican una buena acogida del film (7,3 en IMDB), valorada como un gráfico homenaje a la historia real en que se basa. Los críticos valoraron la película, en general, así como la dirección de Eastwood y una grandiosa interpretación por parte de Cooper (otro ejemplo de actor guaperas que salió de la nada y acabó demostrando mucho más de lo que en un principio apuntaba para acabar siendo, a día de hoy, uno de los mayores referentes en cuanto a intérpretes masculinos), pero el film, como era de esperar tratando de lo que trata, fue una enorme fuente de controversia.



Alerta spoiler.

Antes de empezar con lo que se dijo de ella, diré que, una vez más, fui al cine a ver la cinta y me gustó mucho. Ya sé que no soy muy objetivo y que todo lo relativo a Eastwood lo miro de otra manera, pero eso es algo que él se ha ganado. Recuerdo esta película como muy tensa y bastante triste, y es que Kyle tuvo que lidiar con los recuerdos que lógicamente han de perseguir a alguien que, aunque sea en el contexto de un conflicto bélico, ha terminado con la vida de decenas y decenas de personas. Esto le llevó a, una vez dado de baja, tener problemas para lidiar con la vida civil. En la película, sin embargo, después de que un psiquiatra le preguntase si se sentía perseguido por lo que hizo estando de servicio, él contestó que era pensar en todos aquellos a los que no pudo salvar lo que le perseguía, por lo que se le aconsejó, como terapia, ayudar y estar al lado de veteranos seriamente heridos y con problemas parecidos. Esto hizo que, poco a poco, la propia cabeza de Kyle fuese ajustándose a su nueva realidad, hasta que fue asesinado (junto a un amigo suyo) por una de esas personas (afectada por estrés post-traumático) a las que estaba ayudando.

En cuanto a la tensión antes comentada (además de su tremendo impacto), destacar la escena en la que Kyle ha de terminar con dos personas, presumiblemente madre e hijo (el niño, por lo visto, fue añadido en la película y no existió en realidad), ya que iban a atentar con un explosivo contra un tanque americano. Kyle se queda mirando el cadáver del niño a través de su objetivo, consciente de lo que ha tenido que hacer, y reacciona con desdén cuando su compañero lo felicita. Más impactante aún me resulta otra en la que el protagonista abate a un tipo que porta un lanzacohetes o algo así, y tras eso, un niño muy pequeño llega donde el muerto y con mucho esfuerzo consigue coger el arma con la intención de usarla. Kyle murmura varias veces Don't pick it up (No lo cojas), y cuando se ha resignado a tener que matar al niño, que ya está apuntando, éste finalmente suelta el arma y se va corriendo. La cara de Cooper va mucho más allá del alivio, dada la angustia de la misma. Brutal.



Clint junto a un musculoso Cooper




La crítica fue, como ya he dicho, mayormente positiva, calificando la cinta como tensa, triste y desgarradora, con elogios para un muy cachas Cooper. Uno de los comentarios que más me gustan al respecto de la película fue cosa del crítico DAVID DENBY, quien dijo que la película era una devastadora cinta bélica y a la vez antibélica, una tenue celebración de las habilidades de un soldado, y un triste lamento el aislamiento y mala suerte final de éste. Curiosamente, también se criticó que la peli no aprovechase para ahondar en la factura que la guerra pasa a quienes combaten en ella, y se dijo que las misiones y los objetivos del protagonista carecían de contexto.

Se habló mucho, cómo no, del patriotismo implícito en la película, y se destacó que se homenajease el propio patriotismo del tejano Kyle no rechazando ni sus dudas ni su ansiedad, y tampoco el peaje que para él supuso. Se habló de esta película como de una advertencia a los Estados Unidos, debido al enorme precio que han de pagar quienes combaten en una guerra, independientemente del objetivo. Se trata de evitar la guerra, no de celebrarla.



Miller y Cooper




Pero también se criticó un enfoque descontextualizado y sin término medio del conflicto de Irak, como otra historia de buenos y malos, con hechos distorsionados y concentrada más en lo físico que en lo moral. Así mismo, fue objeto de crítica el hecho de que, según algunos, se retratase al pueblo de Irak como salvajes, con evidente miedo e ignorancia. Recuerdo que mi amigo Ramón (el mismo de antes) dijo que esta vez, Eastwood le había decepcionado, al presentar un relato pro-bélico o algo así, y muy patriota. Yo no estuve de acuerdo. Obviamente, los encargados de contar una historia dan a la misma el enfoque que creen conveniente. Eso para empezar. Pero además, no hay que olvidar que estamos hablando de una historia real, y si ésta parece un relato patriótico, o si, sobre todo, Kyle es representado como tal, es porque seguramente lo fuera. Como ya había dicho Eastwood con relación a su personaje en las películas de Harry Callahan, él cuenta una historia y se aparta de ella, lo que supone no tener por qué estar de acuerdo con lo que en ella se narra. Al fin y al cabo nadie trata de ladrón al responsable de una película en la que un atraco sea llevado a cabo con éxito.

Es curioso que, en este sentido, el bando republicano alabase la cinta por ser patriótica, republicana y por apoyar la guerra contra el terror, a lo que Eastwood contestó hablando de Análisis estúpido y diciendo que la peli no tenía que ver con los partidos, mientras que los demócratas lo acusaron de belicista y de propagandista republicano, contestando Clint esta vez que la película era una declaración antibélica.

Se trata, en cualquier caso, de un tema complejo, y el propio Clint se defendió diciendo que la peli trataba sobre lo que la guerra hace con aquellos que la sobreviven y sus familias, algo que según él es una gran declaración en contra de la misma. Cooper comentó que buena parte de la crítica negativa ignoraba el hecho de que la cinta tratase sobre la negligencia y el olvido hacia los veteranos de guerra, siendo llamativo el número de suicidios entre estos. También dijo que, en vez de criticar a alguien como Kyle, había que criticar primero a quienes lo pusieron a él, y a muchos otros como él, en su situación.



Chris Kyle




El Francotirador recibió un buen goteo de premios y nominaciones y, a pesar de no contar para los Globos De Oro, recibió hasta seis nominaciones de la Academia (incluidas película, actor y guion adaptado por parte de JASON HALL), aunque sólo se llevó el Óscar a la Mejor Edición De Sonido.

La película contiene una serie de incongruencias o imprecisiones con respecto a lo que cuenta Kyle en su libro, aunque no sé si son premeditadas o no, además de algún personaje creado para la trama. Buena parte de lo que se cuenta en la película pasó de verdad, pero, según se dice, se exageró a veces convenientemente la implicación de Kyle en los sucesos.

Lo triste de todo es que muchas de las virtudes de la película, o el propio debate sobre la misma, quedaron eclipsados o directamente olvidados debido al desafortunado uso de un muñeco en la película, si recuerdo bien para hacerlo pasar como el hijo recién nacido de Kyle en brazos de Cooper. La verdad es que yo no me acuerdo de lo que pensé al verlo y quizás ni me di cuenta, pero esto supuso ataques de risa en las salas de cine ante lo cutre del asunto, predicciones negativas de cara a los premios gracias a esto y la sensación de que algo así iba a perseguir al resultado final para siempre. Ya se sabe, aquella peli en la que había un muñeco. El guionista Jason Hall argumentó que el primer bebé tenía fiebre y que el segundo no se presentó, por lo que el rápido y eficiente Eastwood debió decir que le trajesen un muñeco. Si esto es verdad, no es consuelo alguno ni mucho menos una excusa.

Clint escribió la canción TAYA'S THEME para la película y aparece en la misma sin acreditar, como un tipo que asiste a misa.



La imagen que se usó habitualmente
para el cartel de la película




Descanso en la cartelera en 2015 y vuelta a la acción con el estreno en 2016 de la nuevamente exitosa cinta biográfica SULLY. Como ya dije con respecto a J. Edgar y Leonardo DiCaprio, es más que normal que Clint Eastwood se haya codeado y se siga codeando con los actores y directores más grandes, y para Sully contó con otro de ellos, el mismísimo Tom Hanks, que dio vida aquí a CHESLEY SULLENBERGER (apodado Sully), el piloto que en 2009 se vio forzado a amerizar con éxito un avión comercial en el neoyorquino río Hudson, evitando daños para pasajeros y tripulación. Dicho avión, un Airbus A320 que iba a hacer la habitual ruta 1549 de US Airways desde Nueva York, con destino a Charlotte y Seattle, había salido del aeropuerto de La Guardia el quince de Enero de 2009, con ciento cincuenta y cinco pasajeros a bordo. En su subida golpeó a una bandada de pájaros y, a consecuencia de ello, ambos motores fueron seriamente dañados. Debido a las características de los daños y la distancia con respecto a los aeropuertos más cercanos, Sullenberg juzgó apropiado el amerizaje en el Hudson, algo que logró sin ninguna lesión seria para ninguna persona a bordo y en menos de cuatro minutos desde que el avión había chocado con los pájaros, algo que fue considerado poco menos que un milagro (EL MILAGRO DEL RÍO HUDSON). La película también trata los efectos de este suceso en la vida de los protagonistas y la consiguiente investigación llevada a cabo.



Hanks en una imagen publicitaria de la película




Hanks se acompaña del muy poco valorado AARON ECKHART (quien interpreta a JEFF SKILES, copiloto de Sully), ANNA GUNN (conocidísima para el gran público gracias a su participación en la grandiosa serie BREAKING BAD) y, atención, nuevamente Laura Linney. Hay muchos actores que han trabajado más de una vez con Eastwood (ya sea a sus órdenes o como compañeros de reparto), como Gene Hackman, Matt Damon, John Malkovich, Marcia Gay Harden o Donald Sutherland, pero creo que, quitando miembros de su familia (donde voy a incluir a Sondra Locke), algunos actores que dieron vida a personajes distintos en las películas del Hombre Sin Nombre y en las de Harry Callahan, y secundarios tan nombrados por aquí como Geoffrey Lewis, Bill McKinney, etc, sólo Morgan Freeman y ella han llegado a trabajar tres veces con él. Linney da vida a LORRAINE, esposa de Sully.



Eastwood y Tom Hanks, uno de los actores más importantes
y reconocidos de los últimos cuarenta años




La película está basada en la autobiografía del propio Sullenberger, HIGHEST DUTY: MY SEARCH FOR WHAT REALLY MATTERS, escrita junto al autor y periodista JEFFREY ZASLOW y publicada el mismo 2009. El guion lo desarrolló el dramaturgo y novelista TODD KOMARNICKI, quien admitió que lo más difícil de su tarea no fue describir el amerizaje, si no la posterior investigación, ya que la persona que era percibida como un héroe a ojos del mundo podía ser vista de otra forma por los encargados de la investigación.

La cinta no lo hizo nada mal en taquilla a pesar de ser estrenada en Septiembre, un mes tradicionalmente difícil para los estrenos, debido a la vuelta al cole y a la habitual avalancha de series nuevas. Pero las buenas críticas recibidas y la transmisión de boca en boca ayudaron, y la recaudación total indica que terminó multiplicando por cuatro su presupuesto de sesenta millones de dólares. Además, tuvo otro montón de nominaciones (aunque la mayoría no cristalizaron en premios), destacando una nominación al Óscar a la Mejor Edición De Sonido.

Tampoco falló Sully en su cita con la crítica, que alabó el homenaje al típico (o no tan típico) héroe cotidiano, seguro de sí mismo pero a la vez humilde, y que nunca se consideraría a sí mismo como tal. Ya sea por el atractivo de la historia real, o por los nombres relacionados con su adaptación a la gran pantalla, la opinión popular también fue bastante buena, mejorando la de El Francotirador incluso. Llovieron los esperados elogios para la interpretación de un inspirado Tom Hanks (como prácticamente siempre, siendo uno de esos actores capaces de salvar y mantener el interés en una película sólo con su mera presencia), pero también para la dirección de Eastwood, cuyo papel tras la cámara fue equiparado al de Hanks delante de ella.



Eastwood junto a Linney, quien casi veinte años antes
había interpretado a su propia hija en Poder Absoluto




Yo (nuevamente como espectador en la propia sala de cine) encontré la peli brillante y ágil, con una historia digna de ser contada y con todos los mimbres para contarla de manera convincente. Le noté incluso ciertas trazas de documental en su manera de narrar los hechos, y los menos de cien minutos de duración (pocos para una peli de Eastwood) se me pasaron volando. Seguramente sea de las películas más cortas que Clint haya dirigido. Es difícil no sentir impotencia ante lo que se presencia durante la investigación, y es que cualquiera puede darse cuenta de que Sullenberg fue protagonista de una heroicidad, por lo que por qué tratarlo como si fuese todo lo contrario? Podría entender todo esto si su rápida decisión hubiese derivado en bajas humanas, pero no siendo ése el caso es difícil entender los motivos detrás de una investigación así, unida a la lógica persecución mediática. Pero supongo que las cosas no son tan sencillas.

Y de hecho, la cinta generó cierta controversia por la descripción que hace de la NATIONAL TRANSPORTATION SAFETY BOARD (NTSB), encargada de dicha tarea, como un ente inmovilista y antagonista de Sully, ansioso por encontrar fallos en la conducta del involuntario héroe y por forzarle a reconocerlos. Se criticó que la cinta se alejase en tono y esencia de lo que quedó grabado en los registros oficiales, hasta el punto de que antiguos miembros de dicha junta expresasen su preocupación por que la película pudiese hacer quedar a la misma como un órgano incompetente.



Eastwood tratando de encontrar a Aaron Eckhart
detrás de su tremebundo bigotazo




Sully dejó unas cuantas anécdotas y curiosidades, y otras cosas como poco inquietantes:


- En los créditos de la película, los auténticos Sully y Lorraine aparecen dando un discurso a las personas que estaban aquel día en el avión.

- Algunos de las personas que intervinieron de una u otra manera en el suceso aparecen como sí mismas. Hay incluso imágenes de archivo del famoso presentador DAVID LETTERMAN, entrevistando a miembros de la tripulación, sustituidos digitalmente por sus homólogos en la película.

- El propio Sully tiene un cameo al final de la comedia DADDY'S HOME 2 (DOS PADRES POR DESIGUAL 2, dirigida por SEAN ANDERS y estrenada en 2017), cuando aparece como nueva pareja de la madre de uno de los dos protagonistas, BRAD (interpretado por WILL FERRELL). El otro protagonista, DUSTY (MARK WAHLBERG), se muestra encantado de saber quién es, dice que es un héroe, que Clint Eastwood hizo una peli sobre él que los dos protagonistas habían visto juntos (Brad recuerda que salía Tom Hanks y que le había gustado mucho) y que quizás podrían conseguir cupones de vuelo (me descojono). Brad parece estar de acuerdo, pero al ir a saludarlo le retira la mano y se aleja por el aeropuerto en el que estaban gritando que le da igual cuántas vidas hubiese salvado, que nunca podría sustituir a su padre. Muy bueno.

Por cierto, justo antes de eso aparece Mel Gibson, quien también protagoniza la cinta como padre de Dusty.



- Warner había pensado en estrenar la película más o menos por el Día Del Trabajo (primer lunes de Septiembre), pero algo así suponía coincidir, más o menos, con el decimoquinto aniversario del fatídico Once De Septiembre (quitando su estreno en un festival una semana antes, el estreno oficial americano tuvo lugar un nueve de Septiembre). Esto hizo que ciertos ejecutivos se mostrasen recelosos al respecto, ya que en la peli Sully sueña que su vuelo se estrella en pleno Manhattan, con todo lo que eso supone en relación con los atentados de quince años antes. Al final se decidió no cambiar lo previsto, por ser la de Sully una historia de esperanza sobre un héroe que hace lo que debe. De todas formas, parece que todo eso fue casualidad y nunca se quiso estrenar la película a principios de Septiembre para hacerla coincidir con el aniversario.

- Un poco en relación con lo anterior, comentar que algunas aerolíneas pasaron de incluir la película entre las opciones para ver durante sus vuelos, por si alteraba a los pasajeros, pero por ejemplo Virgin Atlantic sí que lo hizo, en homenaje a los pilotos.

- Sully supuso el segundo viernes de estreno más recaudatorio de una peli de Eastwood en Estados Unidos, sólo detrás de El Francotirador, y funcionó especialmente bien en cines IMAX (aquellos con pantallas especialmente grandes y asientos en forma de gradas), habiéndose rodado por completo en ese formato.

- Eastwood compuso el tema FLYING HOME (THEME FROM SULLY).



Sully y Skiles en la realidad y en la ficción




- Y volviendo a la polémica antes mencionada, ya he dicho que miembros de la NTSB se mostraron preocupados por que los espectadores, y la sociedad en general, pudieran tener la idea de que éste era un órgano incapaz. Dijeron que los investigadores no tenían la intención de avergonzar a nadie y que la película se había desviado de lo que en realidad ocurrió (por ejemplo, la cinta muestra a los investigadores aportando simulaciones que indican que un aterrizaje en otros aeropuertos, o incluso un regreso a La Guardia, hubiesen sido posibles, lo que hubiese supuesto poner de manifiesto una negligencia por parte de Sullenberger, pero la investigación real no aseguró para nada el éxito de esas hipotéticas maniobras), llegándose a hablar de cruzar ciertas líneas para llegar a una falta de honestidad con mala leche.

El propio Hanks reconoció que Chelsey Sullenberger se vio afectado por lo recogido en la ficción y pidió que los nombres reales de los investigadores no apareciesen en la película, ya que en la vida real no actuaban como fiscales y así era como la cinta los había retratado.

Por mucho que me gustase la película encuentro esto bastante preocupante, ya que no entiendo los motivos de un hipotético retorcimiento de la realidad con malas intenciones, ni tampoco qué beneficio podría algo así traer para la película. Si se trataba de salvaguardar la integridad de Sully como héroe de cara a promocionar la cinta, no creo que ni la historia, ni la peli, ni el propio Sully lo necesitasen. Y todo esto es preocupante también porque, como decía ROBERT BENZON, uno de los investigadores, los pilotos que se viesen envueltos en accidentes aéreos a partir de entonces iban a estar esperando un trato injusto por parte de los investigadores.  

Lo único que sé que dijo Eastwood al respecto fue que la NTSB había tratado de hacer ver que Sullenberger no había hecho lo correcto.



Héroes sin capa




Ya en 2018 se estrenaría la, ya lo adelanto, algo decepcionante THE 15:17 TO PARIS (15:17 TREN A PARÍS), a pesar de volver a contar una heroica historia real que podía haber dado para mucho más. No en vano, su puntuación en IMDB (5,3) es la peor de cualquier película que haya sido o vaya a ser comentada aquí, junto a la de El Cádillac Rosa.

El guion (de la debutante DOROTHY BLYSKAL) se basó en el libro llamado THE 15:17 TO PARIS: THE TRUE STORY OF A TERRORIST, A TRAIN AND THREE AMERICAN HEROES, publicado en 2016, donde se cuenta como tres jóvenes americanos ayudaron a impedir una masacre en un tren de alta velocidad Thalys que cubría el trayecto entre Ámsterdam y París. Esto aconteció el veintiuno de Agosto de 2015 y dichos jóvenes fueron ANTHONY SADLER, SPENCER STONE ALEK SKARLATOS, quienes también escribieron el libro junto a JEFFREY E. STERN. Pero hay más. Ya he comentado la lógica  e inevitable tendencia de Eastwood a codearse con los más grandes, pero también es verdad que, en busca de espontaneidad y autenticidad, sus castings han contado (ya sea en parte o en su totalidad) unas cuantas veces con intérpretes desconocidos (como ha sido el caso de Jersey Boys, Gran Torino o Cartas Desde Iwo Jima). Pues bien, para esta película fue incluso más allá, ya que a pesar de no haber sido esa la idea inicial, acabó eligiendo como protagonistas a los tres chavales anteriores, quienes obviamente no tenían ninguna experiencia como intérpretes porque, para empezar, ni siquiera lo eran.

Otros actores, aparte de esos tres, también hicieron de sí mismos (incluido el americano-francés MARK MOOGALIAN, otro de los héroes, quien además resultó herido), y la trama sigue a los protagonistas a través de su niñez, etc, hasta llegar al suceso en cuestión. Actrices más conocidas como JUDY GREER o JENNA FISCHER (la simpática recepcionista en la versión americana de THE OFFICE) interpretan a dos de las madres de los protagonistas.



Póster promocional




La cinta se quedó cerca de doblar su presupuesto en la taquilla mundial, lo que no está mal (lejos, por supuesto de las cifras de otras pelis recientes de Eastwood), pero las críticas fueron negativas, incidiendo, para empezar, en el error que supuso dar a los verdaderos protagonistas de la historia la oportunidad de hacer de sí mismos, a pesar de las buenas intenciones del film como homenaje. No todo fue malo, claro está, pero en general se habló de mucho relleno y ciertos diálogos que no ayudaron a los inexpertos actores. Eso sí, no faltaron los elogios para las escenas que muestran el hecho en cuestión, que es lo que realmente importa de la película y sobre lo que ésta se centra.

Yo, básicamente coincido. Así como un hecho como el principal ha de ser inevitablemente tenso y angustioso, y en eso la peli no falla, el resto parece prescindible. No sé hasta qué punto actores profesionales podrían haber paliado esto, pero la película parece haber sido inflada (a pesar de ser incluso dos minutos más corta que Sully) de manera deliberada con escenas sobre la niñez, la amistad de los protagonistas y sus cosas de adolescentes, etc, que verdaderamente no van a ningún sitio y carecen de mordiente. Es como si el acontecimiento principal no diese de ninguna manera para justificar hora y media de metraje y se hubiesen usado excesivos hechos previos (algunos eran, creo yo, necesarios, en cualquier caso) para conseguir llegar a lo que de verdad importa. La verdad es que creo que algo así dice menos del propio Eastwood que de los chavales.

Por otro lado, imagina haber sido parte indispensable de una heroicidad así, que obviamente va a cambiarte la vida, y que luego te llame Clint Eastwood para protagonizar una película sobre ti mismo.



De izquierda a derecha, Skarlatos, Sadler, Eastwood y Stone




Lo que estas personas (junto a otras que también participaron) hicieron fue, en pocas palabras, detener a un terrorista llamado AYOUB EL KHAZZANI (que había sido ayudado por otras personas), quien luego admitiría querer matar americanos como represalia por la intervención americana en Siria. No sé qué posibilidades había de encontrar estadounidenses en un tren que recorre Europa, pero qué más da.

Este tipo se encerró en el baño para prepararse y, cuando un pasajero se dio cuenta de que llevaba mucho tiempo allí, fue a ver qué pasaba y empezó el follón, que afortunadamente sólo resultó en varios heridos, incluido el hijoputa en cuestión, cuando podían haber muerto decenas de personas. Tras herir a un par de pasajeros, el terrorista intentó abrir fuego, pero el arma falló. Ahí es cuando, tras haber escuchado un disparo (el que había herido al ya nombrado Moogalian), los tres protagonistas (dos de ellos militares fuera de servicio) entraron en acción, resultando Stone herido de cierta consideración por un arma blanca de El Khazzani. Stone hizo una llave estranguladora al sujeto, Skarlatos se hizo con el arma inutilizada y empezó a atizar al terrorista, mientras que Sadler y otros pasajeros ayudaron también a que éste quedara inconsciente. Tras eso, Skarlatos fue por todo el tren con el rifle inservible en busca de otros hipotéticos asaltantes, y Stone, médico militar, hizo todo lo posible por parar la hemorragia de Moogalian, quien fue evacuado con éxito a Lille después de que el tren se acabase desviando a la estación de Arras, también en Francia, donde los pasajeros fueron identificados y registrados. Había más de quinientos en el tren.

Entre otros honores, los tres chavales recibieron la nacionalidad francesa y, junto a un señor británico llamado CHRIS NORMAN, que también ayudó a someter al terrorista, recibieron la famosa Legión De Honor francesa (algo que, curiosamente, Eastwood ya había recibido también en 2007) de manos del entonces presidente FRANCOIS HOLLANDE. La investigación posterior señaló que el asaltante llevaba munición para dar y tomar, y que las probabilidades de que el arma del terrorista fallase y se atascase eran de menos de una entre mil, aparte de ser algo más que poco probable el que dicho fallo hubiese pasado en favor de un Spencer que se había dirigido hacia El Khazzani totalmente de frente y a cuerpo descubierto a través de un pasillo del tren.

Verdaderamente me queda muy lejos pensar qué puede pasar por la cabeza de alguien para, en un momento dado, decidirse a arriesgar su vida así, pero esto es emocionante y me están entrando ganas de ver la película otra vez, para ver si la encuentro mejor. Y es que ya lo dije arriba, ésta no está, en principio, a la altura de una historia tan tremenda.



Stone y Skarlatos en una escena en el tren, poco
antes del suceso que cambiaría sus vidas




Clint volvió a actuar en THE MULE (MULA), también estrenada en 2018, en la que interpretó a EARL STONE, un anciano que se convierte en mula (gente a la que las mafias de la droga recurre para que, de una manera u otra, haga contrabando, minimizando los riesgos) para un cartel de la droga y así poder hacer frente a sus problemas de pasta. El personaje de Eastwood se basa en LEO SHARP, un veterano de la Segunda Guerra Mundial que se convirtió, pasados los ochenta años de edad, en mensajero del cartel de Sinaloa, siendo detenido en 2011. Nick Schenk, quien escribió el guion de Gran Torino, basó el de este film en un artículo que el periodista SAM DOLNICK escribió en 2014 para el periódico THE NEW YORK TIMES, llamado THE SINALOA CARTEL'S 90-YEAR-OLD MULE.

Bradley Cooper y Lawrence Fishburne vuelven a trabajar para Eastwood, interpretando a COLIN BATES, un agente de la DEA (DRUG ENFORCEMENT ADMINISTRATION), y a su supervisor WARREN LEWIS, respectivamente. También actúan en la cinta ANDY GARCÍA, DIANNE WEST (como MARY, la mujer de Earl), MICHAEL PEÑA (TREVINO, el colega de Bates) y TAISSA FARMIGA (GINNY, nieta de Earl). Además, aparece Alison, la hija de Eastwood, haciendo también de su hija en la pantalla (IRIS).



Dirigiendo el asunto




El papel de Cooper se basó en JEFF MOORE, responsable del arresto de Sharp, quien fue entrevistado por el ya nombrado periódico en relación con el artículo anterior. Los derechos sobre éste fueron vendidos poco después, pero Clint no fue la primera opción para dirigir. Al final, como en otras ocasiones, el proyecto terminó en sus manos y además se animó a protagonizarlo y producirlo (entre otras personas) para Warner y la compañía que había adquirido los derechos del artículo.

La cinta funcionó y recibió buenas críticas, además de no quedarse muy lejos de cuadriplicar los cincuenta millones de dólares de presupuesto (se convirtió en la tercera película más exitosa de la carrera de Eastwood como actor tras su fin de semana de estreno). En cuanto a esas críticas, se hablaba de cierta predictibilidad (no deja de estar basada en una historia real), pero en general fueron bastante positivas, alabando la cinta como un apropiado y quizás posible canto del cisne para el Eastwood actor, de producirse dicha retirada.



Llevo frutas y verduras, señor agente




En lo que a mí respecta, nuevamente fui al cine para una vez más salir sorprendido por el hecho de que alguien tan mayor y que no sólo dirige, si no que también actúa, sea capaz de hacerme pasar un más que buen rato. Es una pena no poder contar con el añorado Constantino Romero poniendo su voz a Eastwood (esta sería la única peli en la que el ya veterano ARSENIO CORSELLAS, quien fallecería al año siguiente, prestaría su voz al mito), y recuerdo que encontré el personaje interpretado por Andy García un poco estúpido, pero por lo demás, una película que, lejos de ser una obra maestra o algo parecido, resulta muy entretenida. Es curioso, y hasta divertido, ver como Eastwood se lanza otra vez a una especie de carrera contra el tiempo para volver a parecer un cowboy (sin pistola y sin caballo, pero con una camioneta) que no sabe muy bien qué pasará al día siguiente. El sentido del humor de Earl en algunas situaciones (muy buena la de una señorita con la que le juntan para que se de un homenaje) es también digno de ser considerado.



Con Bradley Cooper en el rodaje




Por otro lado, hay que señalar que Eastwood vuelve a interpretar a otro antihéroe, ya que su personaje no sólo acaba dedicándose a lo que se acaba dedicando (aunque no recuerdo si el anciano parecía entender del todo de qué iba la cosa) y por los motivos por los que lo hace, si no que, además, en su vida privada es un egoísta que no duda en dejar a su familia de lado para salirse con la suya.

Peli predecible? Sí. Imperfecta? También. Emotiva y acertada? Más que las otras dos cosas juntas, y por encima de la media de lo que te sueles encontrar en las salas habitualmente.

Clint Eastwood tenía ochenta y ocho años cuando el film se estrenó.



No importa los años que cumpla; esa cara siempre será
 incentivo para ir al cine




Un año después, en 2019, llegaría la brillante RICHARD JEWELL, su siguiente aventura como director. Este film vuelve a basarse en una historia real, acontecida esta vez durante los Juegos Olímpicos de Atlanta, en 1996. JEWELL era por aquel entonces un guardia de seguridad de treinta y tres años que se encontraba de servicio en dichas Olimpiadas, cuando el veintisiete de Julio de aquel año, durante un concierto que se estaba celebrando en el Centennial Olympic Park, descubrió una mochila sospechosa bajo un banco. Dio la alerta y él y otros agentes desalojaron la zona para que se pudiese investigar. Hubo una llamada de alerta y poco después el paquete explotó, matando a una persona (otra más moriría de un ataque al corazón) e hiriendo a más de un centenar, pero las consecuencias hubiesen sido mucho más catastróficas de no haber hecho Jewell lo que hizo. Inmediatamente fue considerado como un héroe por su labor durante el suceso, pero en pocos días se supo que el FBI iba a tenerlo en cuenta como sospechoso basándose en su perfil psicológico. Nunca fue acusado y unos tres meses después se le retiró la condición de sospechoso, pero la investigación y el juicio popular y mediático al que fue sometido hicieron mella en su vida privada.

El film fue escrito por el director y guionista BILLY RAY (autor del libreto de éxitos recientes como la genial CAPTAIN PHILLIPS, del no menos bueno director inglés PAUL GREENGRASS, y protagonizada, por cierto, por Tom Hanks en 2013) a partir de un artículo de la periodista MARIE BRENNER, publicado en 1997 en la revista VANITY FAIR y que se llamó AMERICAN NIGHTMARE: THE BALLAD OF RICHARD JEWELL (The Ballad Of Richard Jewell iba a ser el título de la película, en un principio), y del libro que tiempo después escribieron KENT ALEXANDER y KEVIN SALWEN, llamado THE SUSPECT: AN OLYMPIC BOMBING, THE FBI, THE MEDIA AND RICHARD JEWELL, THE MAN CAUGHT IN THE MIDDLE (publicado en 2019).

La película vuelve a presentar un reparto de muy alto nivel, contando con el todoterreno SAM ROCKWELL, la mítica KATHY BATES (como la madre de Jewell), una nueva interpretación de John Hamm a las órdenes de Eastwood, y la guapa actriz y directora OLIVIA WILDE, objeto de cierta controversia (o más bien su personaje) tras su paso por la cinta. Pero curiosamente el papel protagonista lo interpreta un polifacético PAUL WALTER HAUSER, a quien creo que no conocía de nada.



Walter Hauser (izquierda) y el verdadero Jewell (derecha)





Este proyecto había despegado años antes, alejado del entorno de Eastwood, ya que Leonardo DiCaprio y su colega JONAH HILL iban a producir el asunto, con DiCaprio encargándose de dar vida al abogado en el que se apoyaría Jewell (papel que recaería en Rockwell) y el habitualmente rechoncho Hill dando vida al propio Richard. El ya mencionado Greengrass, quien ya había trabajado con el guionista, parecía ser la opción más factible a la hora de dirigir, pero todo terminó, ya en 2019, en manos de Clint, aunque Hill y DiCaprio coprodujeron la película. Supongo que la intención de este último (no anunciada de manera expresa) de no trabajar más con Eastwood se limita al plano actoral.



Eastwood instruyendo al Richard ficticio




Richard Jewell fracasó en taquilla, al no llegar siquiera a recuperar lo invertido. El fiasco recaudatorio (peor primer fin de semana de Eastwood desde Bronco Billy en 1980 y el segundo peor de su carrera) no se reflejó en lo artístico, ya que las críticas fueron mucho mejores de lo que cabía esperar atendiendo a lo económico. Se alabó la habilidad de Eastwood como cineasta, a pesar de simplificar los hechos, y la labor de los actores principales (Bates, Rockwell y Hauser) también fue tenida en cuenta. De hecho, Bates consiguió sendas nominaciones (sin premio final, eso sí) como mejor actriz de reparto en los Óscar y los Globos De Oro.

Y parece que al público, en general, sí que le gustó la película, o así al menos lo indican las puntuaciones de las webs más habituales. En IMDB, sin ir más lejos, su más que competente 7,5 de media la sitúa como la mejor película de Eastwood en ese sentido desde Gran Torino, superando a Sully, Invictus e incluso a El Francotirador.



Rockwell, Bates y Hauser





Y creo que con razón. No estoy diciendo sin más que esta cinta sea mejor que las tres nombradas (aunque desde luego, con un único visionado de ambas, me parece bastante mejor que lo que recuerdo de Invictus), pero Richard Jewell tiene indudables méritos en lo que a mí respecta, y eso que se me escapó mientras estuvo en cartelera y ha sido de las últimas películas (puede que la penúltima) de Eastwood que he visto, aunque eso, dado el año en que se estrenó, no deja de ser algo bastante lógico.

Clint vuelve a centrarse en otro héroe involuntario, Jewell, quien ve cómo su vida se tuerce, más allá de su propio control, a pesar de haber hecho algo que es moralmente correcto, y haberlo hecho bien. Al igual que en Sully, el espectador asiste con impotencia a la, en principio, injusticia (muy bien reflejada ésta en los disgustos de la brillante Bates y en la cara de incredulidad del protagonista) que supone ver cómo alguien que ha salvado tantas vidas, haciendo lo que debía hacerse, es acosado de esa forma, a pesar de que es de suponer que una investigación tenga que mantener todos los ángulos cubiertos y no dejarse por las apariencias. De ahí que yo no tenga claro si, a la hora de buscar un responsable para todo esto, haya que poner el foco en la propia investigación (desde luego, el papel de Hamm en la ficción,  como el agente del FBI que se encarga del caso, es bastante enervante y cumple perfectamente como antagonista, incluso llevando a cabo alguna que otra acción moralmente reprobable, aunque desconozco si eso se ajusta totalmente a la realidad), simplemente en la prensa o en la propia gente (y eso que por aquel entonces aún no había ninguna red social y todo era distinto en ese sentido).

Si recuerdo bien, en la película se veía como un deprimido Jewell (un, por otro lado, torpe, gordinflas y no muy espabilado sujeto con pinta de perdedor) decidía no salir apenas de casa. Cómo puede la gente pasar tan rápido de alabar a alguien a crucificarlo? Hay que tener en cuenta que, por mucho que la cosa se fuese de madre, Jewell ni siquiera había pasado de ser un mero sospechoso. El espectador conoce el final de la historia, claro está, pero es que la cara del protagonista (la del Richard Jewell real también) parece indicar una absoluta incapacidad para hacer algo malo. De hecho, él mismo le dice al personaje de Rockwell que lo eligió a él como abogado por ser el único en no tratarle como a una persona inferior.



Un molesto Hamm interpreta al agente Tom Shaw




Sea como fuere, la cinta es más que entretenida, aunque resulta bastante triste, y si cada trabajo reciente de un Eastwood casi nonagenario ha de ser valorado y tenido en cuenta sólo por el mero hecho de existir, éste con más razón aún. Gran película.


Aunque con una losa bastante pesada, en mi opinión, en forma de un error derivado de una absurda falta de tacto. Se trata de todo lo relativo a la controversia anterior, centrada en cierta manera en el personaje de Olivia Wilde. Dicha controversia tuvo que ver con el hecho de que su personaje, KATHY SCRUGGS, fuese la periodista (del periódico THE ATLANTA JOURNAL-CONSTITUTION) que primero informó acerca de las sospechas del FBI con respecto a Jewell, a quien la ficción presenta como alguien sin escrúpulos y capaz de cambiar sexo por información. Por lo visto, esto no pasó así en la realidad, y el director de dicho diario se refirió a ello como algo falso y malicioso, a la vez que empleados del mismo pidieron que en la película hubiese un anuncio que avisase al público de que ciertos hechos habían sido inventados con propósitos dramáticos. Ni que decir tiene que se sacó a colación la perpetuación por parte del film del tópico machista relativo a las periodistas que se acuestan con alguien a cambio de información.

La propia Wilde denunció el hecho de que hubiese polémica por lo que su personaje hacía en la trama, cuando el personaje masculino con el que ella se acuesta en la ficción había hecho exactamente lo mismo que el suyo y nadie había dicho nada. También hubo debate al respecto, ya que se dijo que Scruggs era un personaje real y el de Wilde una amalgama de varios. Esto, en mi opinión, es una argumentación vacía, ya que no supone ninguna diferencia. En caso de que el personaje de Wilde no fuese exactamente real, qué importancia podría tener eso con respecto a la polémica en cuestión? Se argumentó también, que lo que realmente impotaba era denunciar el daño recibido por Jewell, a lo que hubo quien contestó que, haciendo lo anterior, se estaba dañando también a Scruggs. Más sobre esto un poco más adelante.

En la segunda temporada de la serie MANHUNT se trata la historia de Richard Jewell, y Scruggs recibe un tratamiento parecido.


Hay que ver con Clint Eastwood. Cuando, tras años de ser un golferas y dar vida a tipos duros, machistas y poco escrupulosos, había logrado por fin tener al feminismo comiendo de su mano, la vuelve a liar.



Olivia Wilde como Kathy Scruggs




En  Octubre de 1996, el FBI dejó de considerar a Jewell como persona de interés. Creo que dicha oficina incluso se disculpó con él por la investigación. Richard siguió con su vida y logró convertirse en policía, además de casarse y tener dos hijos, pero falleció de manera temprana en 2007, a los cuarenta y cuatro años de edad, debido a un problema cardiovascular relacionado con la diabetes y su sobrepeso. Triste y cruel final.

Tras otros atentados en los dos años siguientes, la policía sospechó de un tal ERIC RUDOLPH, quien fue arrestado y terminó confesando su culpabilidad en 2005 para evitar ser condenado a muerte. Sigue en la cárcel.


Pero siguiendo con la polémica anterior, es más que posible que la peor parte de toda esta historia se la llevase Kathy Scruggs, quien falleció en 2001 (tras una sobredosis de fármacos) a los cuarenta y dos años, sola, enferma y hecha polvo por las consecuencias derivadas de esta historia. Ya se ha dicho que fue ella quien adelantó que Jewell podía estar bajo sospecha por parte del FBI, y cuando el calvario de éste terminó y fue declarado inocente, empezó el de ella. De alguna manera, la misma sociedad que, en base al artículo de Scruggs y la posterior investigación, empezó a sospechar de Jewell y a crucificarlo, pasó a acusarla a ella por haber escrito aquello. Y es que el entorno de Richard Jewell interpuso una demanda por difamación al periódico en el que trabajaba Scruggs. Ella, a pesar de convencerse de la inocencia del protagonista de la historia, no se retractó, alegando que cuando ella había escrito su primicia, Jewell era el principal sospechoso para el FBI.



La Kathy Scruggs real, a la izquierda, y Olivia Wilde




Lo que parecía un golpe de suerte en forma de primicia, se convirtió en una carga demasiado pesada para ella. Pasó a ser el centro del huracán y no pudo lidiar con ello, a lo que se unieron sus problemas de salud (agravados por la vida poco saludable que llevaba) y los financieros derivados de sus gastos médicos. Además, la sombra de la cárcel planeaba sobre ella, al no querer revelar sus fuentes, lo que empeoró todo. Ya he contado cómo conseguía Scruggs la información en la película, lo que, en mi opinión y conociendo la historia de esta mujer, supone una decisión desde luego poco afortunada, ya que no fue esa la realidad (y así lo argumentaban sus personas cercanas), pero más por el hecho de que ella ya pagó un alto precio en vida que por el tema del sexismo. Pasar por lo que pasó ella desde el atentado hasta su muerte ya es más que suficiente castigo como para que su recuerdo se vea manchado de esa manera por una licencia dramática, independientemente, insisto, de la polémica sexista de marras.

El hecho de que no se conociese aún quién había sido el responsable del atentado también atormentaba a la periodista, quien no vivió para ver la confesión de Rudolph (cuyos actos supusieron tanto daño más allá del propio atentado) como tampoco pudo verse reivindicada en vida cuando, diez años después de su muerte, se desestimó la anterior demanda por difamación. Por eso, esta historia de Richard Jewell es también la de Kathy Scruggs, y hubiese sido lógico no cometer el error de hacer pasar a esta persona como alguien que no era sólo por, quizás, mantener la atención del espectador (algo que la película no necesita).

Y mejor aún hubiese sido que a Eastwood se le hubiera ocurrido hacer, a continuación, una peli complementaria de ésta sobre lo acontecido con Scruggs. De hecho, el periódico en el que ella trabajó publicó un artículo (creo que en Noviembre de 2019), de la periodista JENNIFER BRETT, llamado THE BALLAD OF KATHY SCRUGGS, en clara referencia a aquel que Variety publicó sobre Jewell, donde se recogían testimonios de familiares, etc. Lo que pasó en esos cinco años previos al fallecimiento de la periodista y este artículo podrían ser un gran punto de partida.



Foto promocional. Tras Hauser, Bates y Rockwell, se puede ver
 a Hamm, lejos a la izquierda, y a Wilde detrás de Bates




CRY MACHO es, a falta del estreno de Juror Nº2 (la cual se espera que sea la película final del ídolo), la última película de Eastwood por ahora, y una sobre la cual se hace algo más difícil escribir ya que, casi con toda seguridad, se convertirá en la última cinta de Clint Eastwood como actor. Esto es algo complicado de asimilar, por mucho que el tiempo no espere a nadie y la jubilación tenga completo sentido. Se lo merece totalmente, pero a la vez se hace difícil despedirle y hacerse a la idea de que no habrá más pelis del Clint Eastwood actor. Ya comenté que creía que Clint tenía intención de despedirse de su faceta interpretativa con Gran Torino (y esto no es sólo una sensación mía) para dedicarse sólo a dirigir (como hace aquí), producir, etc, y que si después de esa peli había vuelto a ponerse delante de la cámara había sido de manera imprevista y, bien por amistad (como la que le une a Robert Lorenz, en el caso de Golpe De Efecto), o por haber surgido la inesperada posibilidad de contar otra buena historia, y de paso acabar siendo él la persona más apta para protagonizarla, como quizás pasó con Mula, ya que él se hizo cargo del proyecto y, de paso, su edad encajaba perfectamente con la del ya nombrado Leo Sharp.

Y con respecto a Cry Macho, supongo que el motivo fue aprovechar una oportunidad rechazada hace tiempo y cerrar el círculo con respecto a una historia que se remonta a los años setenta. Pero hasta aquí. No creo que haya nada después.

Se estrenó en 2021 y se trata de un western moderno ambientado en los años setenta, en el que Eastwood interpreta a MIKE MILO, una antigua estrella del rodeo encargada de llevar a un chaval (RAFO, interpretado por EDUARDO MINETT) de México a los Estados Unidos, donde está el padre del mismo. El reparto es corto y mayormente compuesto por nombres para mí casi desconocidos, entre los que sólo destaca el cantante y actor DWIGHT YOAKAM.



Milo y el gallo Macho




Como he dicho, la historia se remonta a los setenta, y supongo que por eso la acción transcurre a finales de esa década. Por aquel entonces, un guion del escritor RICHARD NASH, terminó siendo convertido por esa misma persona en una novela propiamente dicha, tras haber sido incapaz de venderlo. El libro tuvo mucha mejor suerte, por lo que retomó aquel guion y, sin cambiar nada del mismo, consiguió colocarlo (?). Pasó el tiempo, y la intención de hacer una película con él nunca llegó a buen puerto. De hecho, se ofreció el papel principal a Eastwood a finales de los ochenta y lo rechazó. No creo que la novela presente a un protagonista tan mayor como el Clint actual (me da que ni siquiera contiene un salto en el tiempo desde la retirada de Milo y la trama principal, como sí hace la película), pero de hacerlo, se me antoja un movimiento un poco ridículo el de ofrecer ese papel a alguien que entonces tenía unos cincuenta y ocho años. Es más, el propio Clint, tras decir que no, sugirió nada menos que a un veterano como el legendario ROBERT MITCHUM, que al menos ya pasaba de los setenta por aquella época.

Otros nombres importantes fueron relacionados con el proyecto según fueron pasando los años, y parecía que el mismísimo Arnold Schwarzenegger iba a ser el definitivo, ya en el siglo actual, pero su implicación en la política californiana primero, y un escándalo relacionado con un posterior divorcio después, hicieron que el proyecto quedase en nada. Fue en 2020 cuando se supo que Eastwood se haría cargo a todos los niveles, incluyendo la contribución al guion del recurrente Nick Schenk (Gran Torino, Mula). El rodaje terminó en Diciembre de aquel mismo año y Clint, fiel a su fama, lo finiquitó un día antes de lo previsto. Hay que observar que, por aquel entonces, Eastwood ya había cumplido los noventa años y a su notoria eficiencia a tan avanzada edad hay que añadirle su labor como actor, incluso montando a caballo por primera vez desde Sin Perdón (a los noventa!). Y todo en una época llena de protocolos Covid y a pesar de lo difícil que, según el propio Clint, fue rodar las escenas del gallo, para las que se llegaron a usaron once pájaros.



Alguien está enfadado




Una de las señales que indicarían al público que ésta iba a ser la última ocasión para ver a Eastwood en pantalla, fue una campaña promocional más llamativa de lo habitual, lo que incluyó presentar el tráiler de la cinta junto a imágenes de archivo de la carrera de Clint, a modo de homenaje, además de mensajes de colegas de profesión como Morgan Freeman, Meryl Streep, Mel Gibson, Hilary Swank o Gene Hackman. Todo esto, si bien para los críticos no ayudó en exceso a aumentar las ganas de ver la película, sí que mostraba un aprecio necesario hacia el mito que sin duda iba a emocionar a los fans de Eastwood. También hubo quien dijo que Cry Macho sería una nota a pie de página en la taquilla (acertando en este sentido), ya que toda la promoción terminaría perdiendo su efecto (no creo que esa fuese la razón de lo anterior). Además, junto a su estreno en la gran pantalla, HBO MAX ofreció la película en su servicio durante un mes.



En cuanto a la recaudación, ésta fue bastante pobre, quedándose a medio camino de recuperar los treinta y tres millones invertidos. Antes del estreno, ya se había criticado, incluso desde dentro de los propios estudios, la decisión de Warner de financiar la peli, pero la propia compañía era consciente de que era difícil que Cry Macho obtuviese beneficios. Simplemente se sentía en deuda con alguien con quien había trabajado varias décadas y que había sido capaz de terminar películas a tiempo y por debajo del presupuesto. A Warner se le olvidó comentar que además, y por lo general, esas películas habían sido tremendamente exitosas. Es de Clint Eastwood de quien estamos hablando.

También es verdad que el Covid no ayudó a nadie durante esa época y que no sé si se tiene en cuenta a la hora de fijar la recaudación los más de millón y medio de visionados a través de HBO que se contabilizaron en los hogares estadounidenses.



Milo junto a Rafo (Eduardo Minett) y uno de los
gallos encargados de dar vida a Macho




Con respecto a la acogida crítica, empezaré dando mi opinión. Cry Macho es una película floja. Sin más. No es mala, de ninguna manera, pero es bastante inofensiva. Cuenta una historia de carretera e improbable amistad (en esto se parece a otras, como Un Mundo Perfecto, Million Dollar Baby o Gran Torino) que ya se ha visto muchas veces antes, pero lo peor del conjunto es que cuenta dicha historia con, en mi opinión, poca fuerza y escasa pasión. Está claro que, tras tantos años e incluso un buen puñado de pelis más que buenas en los últimos tiempos, el resultado artístico de esta cinta era lo de menos, y lo importante era verlo a él otra vez. Una última vez. Pero me da un poco de pena que este último baile no haya podido ser algo más brillante y entretenido, como sí había sido, sin ir más lejos Mula. A pesar de todo, creo que la peli acierta al mostrar a un Eastwood muy mayor actuando de una manera acorde a su edad, por mucho que la trama se preste a según que situaciones. Otra cosa hubiese sido ridícula. Aún así, está el detalle de montar a caballo (él mismo reconocía que el encargado de los caballos estaba un poco preocupado), y recuerdo también que un tipo se llevaba una hostia bien dada de manos del mito. Hay cosas que no cambian. La escena en la que aparece bailando junto a NATALIA TRAVEN (MARTA en la ficción) resulta optimista y bonita como despedida.

Creo que el doblaje español de Eastwood corrió a cargo de CAMILO GARCÍA.



Eastwood y Traven




Con respecto a las críticas, obviamente no todo fue bueno. Se señaló lo torpe y extraño de que Eastwood fuese el protagonista. Ya he comentado que creo que en el libro, Milo no es ni de lejos tan mayor. También se criticó el guion de Schenk por débil, aunque creo que él sólo añadió cosas a lo que Nash había hecho.

Se comentó que la historia era repetitiva, sin nada que aportar y parecida a otras como Mula o Gran Torino. Y, contrariamente a lo que parecía quedar claro sobre ella, en THE NEW YORK OBSERVER dijeron que decepcionaría al espectador, dejándolo con la nostalgia de lo que una vez fue. Esto puede ser cierto hasta tal punto, de haber sido ésta una más de las pelis recientes de Eastwood como actor, pero no la última. En mi opinión, creo que una crítica así pierde su razón de ser ante el hecho de que Clint no vaya a actuar más. Nostalgia sí. Decepción? Ninguna. Más bien agradecimiento.



Pero voy a dejar lo positivo para el final. La cinta tiene un discreto 5,7 en IMDB, algo que la aleja de las más que buenas (en algún caso extraordinarias) puntuaciones que sus compañeras de este siglo han logrado (quitando la del tren a París), pero la crítica sí que destacó el carisma de Eastwood y el encanto de verlo una vez más, además de la naturaleza sencilla y sin prisas de la trama. En este sentido, hay una serie de declaraciones que me gustan bastante y que resumen bien lo bueno del film:


- El crítico GLENN KENNY, escribiendo para la web del ya mencionado Roger Ebert, una vez fallecido éste, decía que la honestidad de la peli acerca de lo que merece la pena en la vida es la razón por la que la película existe.

BILGE EBIRI (Vulture), periodista y cineasta, dijo que la mera presencia de Eastwood bastaba, y que la cinta funcionaba cuando tenía que hacerlo, al igual que el protagonista, al que no observamos como un actor pasados los noventa años de edad, si no como un icono que, más que no envejecer, se conserva en su propia y resistente gloria. El eterno y torturado cowboy del cine.

DAVID SIMS (THE ATLANTIC) alabó que Eastwood usase la película para reflexionar sobre su carrera con una historia sobre alguien que aún tiene cosas que aprender.

ANTHONY SCOTT (New York Times) habló de una peli para pasar el rato con poco que probar y lo suficiente que decir. Aconsejaba que si era el viejo (Eastwood) quien conducía, lo mejor era subirse y disfrutar del viaje.



If the old man's driving, my advice is to get in and enjoy the ride




Y esto es todo en lo que a las sesenta y cinco (si he contado bien) películas de Clint Eastwood que he visto se refiere (todas en las que ha participado como actor, director o ambos, desde que trabajó con Sergio Leone). Cuando se estrene Juror Nº2, y puede que sea este mismo año (2024), tendré que comentarla también. A priori, el argumento tiene buena pinta, y aunque no haya en el reparto ningún actor que me llame especialmente la atención, hay caras bastante conocidas, como TONI COLLETTE, NICHOLAS HOULT, J.K. SIMMONS KIEFER SUTHERLAND. Veremos.





Fin de la sexta parte

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